Portada

Novedades en Crisis de Papel

  • El humor, la poesía    Jaime García-MáiquezLa humana cosaPrólogo de Luis Alberto de CuencaRenacimiento. Sevilla, 2024. Jaime García-Máiquez es un poeta paradójico: muy de escuela, con claros y reconocidos maestros, y a l …
  • Qué hacer con la poesía   Raquel LanserosEl sol y las otras estrellasVisor. Madrid, 2024. La poesía es imprescindible; la mayoría de los libros de poesía que se publican son perfectamente prescindibles. O dicho con otras pal …
  • Benet y el síndrome de Diógenes   El plural es una lataBiografía de Juan BenetJ. Benito FernándezRenacimiento. Sevilla, 2024. El autor de esta primera biografía de Juan Benet tiene una de las principales cualidades necesarias para s …

Novedades en Café Arcadia

  • Los papeles perdidos: Galdós en Aldeanueva   1GRANDES ESPAÑOLES Allá por 1910 o 1911, dos jóvenes periodistas  –Luis Antón del Olmet y Arturo García Carraffa– tuvieron la idea de publicar una serie de libros biográficos sobre “Los grandes es …
  • Los papeles perdidos: El misterio de la Quinta    1MARTINHO DA ARCADA En una esquina se encuentra sentado Fernando Pessoa. Su postura es muy semejante a la del famoso cuadro de Almada Negreiros. Una taza de café sobre la mesa, un cigarrillo en una …
  • Coraje y alegría: El arte de perder  Sábado, 22 de junioLOS NUEVOS MÁRTIRES Hojeo el periódico mientras llegan los amigos con los que he quedado para comer. Cuando llegan, no puedo por menos de comentarles una noticia.             —Di …
Autor: admin 25 septiembre 2008

Rafael Toriz

A Mariana Veiga

Somos la ciudad y somos algo distinto:
somos su pregunta y su negación,
su conciencia y su poema

(Octavio Paz)

Esplendorosas y miserables, rudimentarias o maravillosas, las ciudades verdaderas son un imán de las pasiones. Pesadas como la culpa o ligerísimas como las nubes, todas las ciudades encierran un misterio. Quebrantar sus fortalezas o abandonarse a sus embrujos son las únicas posibilidades para palparlo y, con un poco de suerte, acaso hacerlo nuestro.

Describir las ciudades es descubrir el cuerpo propio. Caminar sus calles es poseer pasos perdidos y olvidados; de allí que viajar implique obedecer las intuiciones.

Autor: admin 25 septiembre 2008

Pelayo Fueyo

Jueves, 8 de noviembre de 2007. Estoy cansado de conversar con las cosas de mi casa. Como soy poeta, ellas quieren que les otorgue una nueva función. Quizá ser metáforas de una alegoría que yo no represento. Y es que soy una momia. También se me pasan por la cabeza ideas que son imágenes mágicas. Pero nadie podría constatarlo. Es de noche, y el reloj de arena se ha roto por el centro. Tengo un sueño que se parece a la eternidad.

Autor: admin 25 septiembre 2008

Julio José Ordovás

A ciertas horas, el Coso zaragozano parece la Quinta Avenida. Hilario J. Rodríguez —gorra de los Yankees, camisa ceñida, americana y mochila escolar a la espalda— también parece un escritor neoyorquino. Caminamos hasta el Levante, un café tan europeo como castizo. Hilario ha recalado en Zaragoza por un plazo indefinido, y la ciudad le gusta sobre todo en lo que tiene de puzle de ciudades. Me cuenta que el otro día fue al cine a ver Wanted. «Una mierda. Pero es que yo no me pierdo ninguna peli en la que salga Angelina Jolie».

Autor: admin 25 septiembre 2008

Dave Eggers : Qué es el Qué
Traducción de Toni Hill Mondadori, Barcelona, 2008

El manto narrativo de Qué es el Qué se teje con la historia de Valentino Achak Deng, un refugiado de la guerra civil de Sudán, y comienza con el robo que sufre en su apartamento de Atlanta por una pareja de afroamericanos. Valentino deja pasar a una chica que quiere hablar por teléfono, y detrás entra un ladrón, que está compinchado con la joven. En principio podemos pensar de Valentino que se trata de una persona ingenua, que no sabe nada de la vida y, sin embargo, Valentino ha visto mucho, conoce la levedad de la vida, la facilidad con la que puede acabarse.

Autor: admin 25 septiembre 2008

Andrés Neuman nació en 1977 en Buenos Aires, ciudad donde pasó su infancia. Vive en Granada, en cuya universidad estudió e impartió clases. Es autor de las novelas Bariloche (Finalista del Premio Herralde), La vida en las ventanas (Finalista del Premio Primavera) y Una vez Argentina; de los libros de cuentos El que espera, El último minuto y Alumbramiento; y de los poemarios Métodos de la noche, El jugador de billar, El tobogán (Premio Hiperión), La canción del antílope y Mística abajo. Ha publicado también el libro de aforismos y microensayos El equilibrista, la colección de haikus Gotas negras, los Sonetos del extraño y una traducción del Viaje de invierno de Wilhelm Müller. Mediante una votación convocada por el Hay Festival y Bogotá Capital Mundial del Libro, fue incluido en la selección Bogotá-39 entre los principales jóvenes autores nacidos en Latinoamérica. Su página web es www.andresneuman.com.

Autor: admin 25 septiembre 2008

Javier Almuzara

RESURRECCIONES

El 24 de febrero de 1607 la corte ducal de Mantua y un grupo de embajadores extranjeros asistió en el palacio de Vincenzo Gonzaga a una representación única que cambiaría la historia de la música. Se trataba de una tragedia inspirada en la mitología griega, compuesta por Claudio Monteverdi, sobre un libreto de Alessandro Striggio. No era la primera vez que se utilizaba el nuevo arte de recitar cantando, pero sería la primera obra maestra del género.

Autor: admin 24 julio 2008

José Luis Argüelles: Pasaje

Trea, Gijón, 2008

Hace veinte años, silenciosamente entraba en escena un poeta importante, a tener en cuenta. Se trataba de Jose Luis Argüelles (Mieres, 1960). Publicaba un primer libro, Cuelmo de sombras (1988) en la casi secreta colección Versus, del Centro Cultural y Deportivo mierense, que por aquellas fechas dirigía Jose Manuel Cuesta Abad y que también publicó, asimismo, un libro de poemas de Herme G. Donis. Allí también iniciaría sus pasos Jose Luis Piquero, con Las ruinas (1989). Era aquel primer libro un conjunto de poemas estimable, de entre los cuales —si se me permite la referencia autobiográfica— unos cuantos quedaron grabados para mí en la memoria. Trataban, melancólicamente, de la soledad, de la vida en provincias, del desamor, la adolescencia, el alcohol o el amor mercenario heterosexual (del cual no existen demasiadas referencias en la poesía española reciente). Tenía algunos de los mejores sonetos en verso blanco de la época.

Autor: admin 24 julio 2008

Martín López-Vega: Libre para partir
Ediciones Trabe, Oviedo, 2008

Hay libros que nos dejan un irresistible deseo de hacer las maletas. Casi todos los de Martín López-Vega son de esa clase, no solo las prosas viajeras. Sus poemas están llenos de palabras exóticas, de rincones extranjeros, de la felicidad melancólica del que siempre está fuera de casa, sobre todo cuando está en casa.

Autor: admin 23 julio 2008

Alfonso López Alfonso: Camino de vuelta
Ediciones Trabe, Oviedo, 2008

En Camino de vuelta Alfonso López Alfonso mira atrás y nos cuenta «con ironía y melancolía, las gentes, las cosas, los rumbos y los tumbos que le han hecho llegar a ser el que es». Se trata de un libro de memorias escritas cuando el recuerdo todavía está vivo y los personajes, los hechos, los libros, las casas y las cosas tienen aún un fulgor vívido y cálido. El autor, con treinta años solamente, nos ofrece una obra más propia de una madurez nostálgica que de una juventud vibrante, y nos cuenta en catorce capítulos la historia del lugar donde nació, donde transcurrió su niñez, donde fue feliz y donde descubrió el amor y la muerte. Moncóu: un lugar real, donde todo lo que ocurre es verdadero, nada es mítico, fantástico, sobrenatural. Camino de vuelta puede leerse como una novela, a veces como un poema en prosa, siempre con una emoción honda. Sorprende la sencillez franciscana con que cuenta la historia. Nada más comenzar a leer el libro ya empezamos a sentir algo misterioso que se va adentrando dentro de uno y que a veces le ahoga, a veces le llena de ternura, siempre le conmueve.

Autor: admin 22 julio 2008

Claudio Magris: El infinito viajar. Traducción de Pilar García Colmenarejo
Anagrama, Barcelona, 2008

Nuestra época ha ido arrinconando al cuarto trastero de los géneros literarios el cuaderno de viaje por más que este cuenta con una vigorosa tradición a sus espaldas, tan longeva que en algunas latitudes llega incluso a emparejarse con las primeras andanzas literarias. Lo paradójico es que esa pérdida gradual de interés se está verificando en un momento en el que la mayor parte de la humanidad se somete periódicamente al rito del viaje, dando pie a un incremento notable de la cultura geográfica. Cabía suponer que tal divulgación de conocimientos iba a corresponderse con un aumento de la inquietud del lector por averiguar la sensibilidad con que otros se han aproximado a los mismos enclaves a los que hemos conseguido llegar, o bien por apreciar el singular ángulo visual con el que los viajeros que nos han precedido describieron tiempo atrás los mismos paisajes que también nosotros hemos tenido la suerte de poder contemplar más o menos intactos. Y sin embargo la sensación que se tiene al dar un vistazo a las listas de ventas de libros es la de que el género agoniza y que sólo en casos excepcionales la literatura de viajes logra acaparar la atención de unos pocos lectores fieles al género. Vivimos inmersos en una sociedad para la que la práctica turística es un rasgo distintivo al alcance de todos los bolsillos, y en cambio el viaje parece haber perdido relevancia como vía de conocimiento y de maduración intelectual del individuo. Tal vez para la mayor parte de nosotros la necesidad compulsiva de desplazarnos a otros lugares no constituya más que la necesaria dosis de nomadismo hedonístico que nos pide de vez en cuando el organismo: un banal principio activo al que cabe agregar, con la debida cautela, dosis edulcoradas de excipiente humanístico con el que dorar éticamente la píldora.