Juan Carlos Abril
No muy temprano cogemos el autobús para Chongqing. Sobrevivir a un autobús chino más de cinco horas puede llegar a convertirse en una especie de tortura china sui géneris. La incomodidad de cualquier transporte aquí se ve aumentada por la desagradable costumbre de poner música con tanto volumen, y de un aire acondicionado polar. Con todo, hemos llegado. La estación de autobuses está frente al Yangtsé, el Río Azul. Chongqing tiene más de cinco millones de habitantes. La densidad de población en China se concentra en la zona de Shanghai, el sur, Beijín, y Sichuan, la provincia que comprende Chengdu, Leshan, Chongqing… Más de cinco millones —la provincia comprende más de treinta— aquí es como decir una ciudad cualquiera de las normalitas, una ciudad que apenas cuenta en las estadísticas en China. Estoy exagerando un poco.