Aurora Venturini
Las primas
Caballo de Troya,
Barcelona, 2009
Esta novela de la escritora Aurora Venturini abre las puertas de un hogar estremecido por la desilusión. Es la hija de una maestra abandonada por su esposo, una imaginativa y brutal pintora principiante que firma sus cuadros con el sobrenombre de Yuna, quien nos presenta a su familia, el desventurado clan que vemos cambiar y crecer a lo largo de estas páginas. Son personajes a lo que no les falta ni la luz ni, aunque humilde, el alimento: «En el fondo cacareaba un gallinero que nos daba de comer y en la quintita brotaban zapallos milagrosamente dorados, soles desbarrancados y sumergidos desde alturas celestiales a la tierra, crecían junto a violetas y raquíticos rosales que nadie cuidaba, ellos insistían en poner la nota perfumada en aquel albañal desgraciado». Pero, nada más comenzar la lectura, comprobamos que la suerte los ha bautizado con el agua de la adversidad. A la soledad que supone la ausencia del padre, hay que sumar otros factores negativos como el retraso mental ambiguo y confundido con la inocencia de la propia protagonista, la discapacidad física de su hermana Betina y de los compañeros del colegio al que esta acude, el sexo mercenario con el que se gana la vida la prima Petra, y tantas otras taras que vamos descubriendo, ensombrecidas por el asco, la vergüenza, la reprobación, la pena o la envidia, de la acomplejada y solitaria Yuna, un personaje, sin embargo, lúcido y dócil.