Portada

Novedades en Crisis de Papel

  • El vino del verano Ángeles Carbajal Nostalgia del cielo Difácil. Valladolid, 2025.  Cita a muchos autores Ángeles Carvajal en Nostalgia del cielo, de Francisco Umbral a Marguerite Yourcenar, de José Hierro a Tennessee W …
  • Para qué sirve la literatura  José Luis de Vilallonga El Rey. Conversaciones con Juan Carlos I de España Traducción de Manuel de Lope La Esfera de los Libros. Madrid, 2025. La literatura, el arte en general, sirva para desvelar l …
  • Los poetas regalan su trabajo  Yolanda Castaño Economía y poesía: rimas internas Traducción de Ana Varela Miño Páginas de Espuma. Madrid, 2025. Yolanda Castaño, una de las pocas poetas que viven de su trabajo poético, ha escrito u …

Novedades en Café Arcadia

  • La rueda de la fortuna: Regalos de Navidad  Sábado, 13 de diciembreRUE SAINT-GEORGES Regalo del azar, sobre la mesa central de mi librería de viejo favorita encuentro un montón de llamativos ejemplares de L’Illustration, aquella revista france …
  • La rueda de la fortuna: Tren, tesoro y profecía  Domingo, 7 de diciembreADIÓS A INÉS Vuelvo de despedir a Inés Illán en el tanatorio del Salvador con una extraña sensación de tristeza y a la vez consuelo. La conocí, como mi profesora de latín, allá …
  • La rueda de la fortuna: La verdad y otras dudas  Sábado, 29 de noviembreNUNCA SE SABE  Los problemas de salud mental han ido perdiendo el aura vergonzante y descalificadora que tenían, y eso está bien. A fin de cuentas, nadie se libra de ellos, com …
Autor: admin 14 enero 2006

Ted Kooser
Versión y nota preliminar de Hilario Barrero

Cuando nombraron a Ted Kooser el decimotercer poeta laureado de los Estados Unidos, reemplazando a Louise Gluck, declaró: “Intento en mis poemas tomar las cosas sencillas y mirarlas con una nueva luz”. Kooser, que es un maestro en el arte de la metáfora, escribe con una claridad que a veces deslumbra pero que nunca ciega. En sus poemas destacaríamos tres pilares básicos: precisión, claridad y sencillez, y en ellos se habla de herramientas, de un tatuaje, de un entierro o de un huracán. Es una poesía asequible, aparentemente fácil de entender. Sin embargo, no hay que dejarse engañar por la sencillez del poema. Escondidas o a flor de piel comienzan las posibles lecturas e interpretaciones.

Autor: admin 10 enero 2006

Julio José Ordovás

1.

Noches en las que todos los semáforos están en blanco.

2.

En un callejón sin nombre de una ciudad inventada. Un hombre mata a otro hombre, a puñaladas. Desde detrás de un cubo de basura, contempla un gato la escena. Yo soy el gato. Yo soy el único testigo del crimen. Un gato afantasmado. Y cobarde.

Autor: admin 7 enero 2006

Antón Arrufat

Donde el autor se cuenta

Estimados espectadores, quien se encuentra ante ustedes y tratará de corporizarse en lo posible hasta convertirse en cuerpo verbal, nació hace setenta años en una distante ciudad provinciana, Santiago de Cuba, distante de La Habana naturalmente, y que todo santiaguero, en mi juventud al menos, pronunciaba con cierta prosopopeya, dosis de envidia molesta, y como si en su entonación se encontraran mayúsculas marcadas, letras resonantes para exclamar “¡La Capital!”. Según me contaron mis padres, quienes al nacer primero que yo tuvieron la posibilidad de traerme al mundo y verme nacer, el hecho ocurrió un día del año 1935, el 14 de agosto. Yo puedo jurar que de tal nacimiento nada supe hasta pasados varios años, cuando empecé a tener eso, tan misterioso, que llamamos “conciencia”. Para aquellos aficionados al horóscopo occidental, nací bajo el signo incandescente de Leo, segundo decanato, gente que se caracteriza por su gran obstinación prepotente y voluntariosa, dada a las pasiones eróticas y políticas, y sin embargo propensa al suicidio cuando comprende que ha fracasado en sus proyectos o inclinaciones. Como resulta claro hasta este minuto, soy la negación viviente de tal afirmación zodiacal.

Autor: admin 4 enero 2006

José Ángel Gayol

Al margen de cualquier consideración pesimista, lo cierto es que a los anaqueles de bibliotecas y librerías siguen llegando volúmenes de cuentos en forma de antologías, de textos independientes, en los géneros más variados, sin medida de cantidad o calidad. Para un género, el del cuento, aparentemente en receso, cada año se editan nuevas obras, a menudo de gran valía y poca difusión, que sirven de espejos a una realidad literaria inagotable. El cuento se cultiva como un minifundio rodeado de los latifundios extensísimos de la novela y, a pesar de ello, encuentra sus lectores, que acuden como arqueólogos a la caza de las muchas joyas que nos regalan autores jóvenes o ya consagrados.